El presidente de la República, Alan García Pérez, expresó hoy, sábado, su respaldo a la decisión de la Municipalidad de Lima de declarar la intangibles los acantilados de la Costa Verde, con lo cual se prohíbe la construcción de edificios sobre ellos.

Tras señalar que la decisión municipal no afectará el proyecto de mejoramiento que impulsa el gobierno en esta zona porque se tratan de obras viales y a nivel de la playa, dijo que los farallones le dan un carácter agreste y natural al litoral y deben preservarse.

Aclaró que si bien la inversión privada se respeta, los inversionistas no determinarán cómo vamos a desarrollar el país y que los acantilados de la Costa Verde, por su innata belleza natural, podrían convertirse en un patrimonio internacional si estuvieran más iluminados.

De igual forma, García Pérez recordó su oposición a la construcción de viviendas en el Morro Solar, en Chorrillos, por tratarse de un área de alta connotación histórica.

Respecto a las obras que se están ejecutando en la Costa Verde dijo que se ha puesto en valor un área de 30 hectáreas, es decir, unos 300 mil metros cuadrados para aprovecharse como parques, zonas de recreación y deporte.

El presidente aprovechó la inspección a las obras para inaugurar el puente peatonal Mar Bella. En total el proyecto contempla cuatro puentes, dos en la jurisdicción de Magdalena, ya concluidos, y dos en San Miguel, en plena ejecución.

El Mandatario calculó que en marzo próximo ya se podría permitir el ingreso de los veraneantes en la zona, para que realicen en esta zona diversas actividades deportivas, recreacionales y culturales.

Adelantó que para ir acondicionando las playas a los bañistas se iniciará una campaña de limpieza de piedras y que se construirá un rompeolas que servirá como mirador turístico sobre el mar.