Una demanda sólida, fundamentalmente, sostiene la expansión que registra el sector inmobiliario, manteniendo aún margen para seguir creciendo.
Refirió que si se toman como base los precios de los inmuebles en Lima del 2009, y se comparan con otras ciudades de la región, se encuentra que con US$ 879, el precio del metro cuadrado (m2) en la ciudad capital del Perú es bastante más bajo que el registrado en ciudades como Santiago de Chile o Bogotá.
Es más, haciendo referencia a otro indicador que compara la situación del precio anual en dólares por m2 del alquiler de oficinas de lujo entre las mejores ciudades para hacer negocio, el ex titular del MEF sostiene que se observa que en Lima todavía existe espacio para aumentar precios , y no solo en alquiler sino también para venta, sin que eso implique la existencia de una burbuja inmobiliaria.
Oferta y demanda
“Hay un soporte de demanda para sostener crecimientos en la actividad inmobiliaria”, subraya Luis Carranza, y enumera que por el lado de la demanda se encuentran indicadores como el aumento del ingreso familiar; una estructura poblacional distinta; facilidades de acceso a créditos y programas habitacionales por parte del Gobierno.
Y por el lado de la oferta –continúa– se encuentra que los precios de materiales de construcción están al alza; así como el precio de la mano de obra, y luego, evidentemente, existe una oferta más o menos fija de terrenos y casas con precios que también reaccionan al alza, pero no sustentados en burbujas sino en factores de demanda secundarios.
Haciendo referencia al valor del alquiler de oficinas de lujo en diversas ciudades de América Latina, un dato curioso, señala Carranza, es que los precios en Sao Paulo y Río de Janeiro están bastante alejados del resto de ciudades de la región, esto puede ser un indicador de una burbuja, o el crecimiento de una burbuja.
Fuente: Diario Gestión