Lo cierto es que el proyecto de crear entre 130 y 180 nuevos espacios de estacionamientos debajo del césped del Parque Central, ubicado entre las calles Juan de Arona, Las Camelias, República de Colombia y Augusto Tamayo, viene a ser, en buenos términos, solo un paliativo a la urgente necesidad de contar con 9.600 espacios de parqueo, según un estudio de ESAN de finales del 2008, encargado por la comuna sanisidrina y que es el último diagnóstico de este problema con el que cuenta esa comuna, según Juan Antonio Vega Fernández, gerente municipal de San Isidro.
TEMORES
Roxana Aguirre Ancieta, cuya oficina, ubicada en la cuadra 2 de Juan de Arona, tiene vista al parque, cree, al igual que la señora Velásquez, que la intervención municipal afectará las áreas verdes y que los vehículos que se estacionen en el parqueo subterráneo emanarán gases tóxicos a la superficie. “Estos parqueos generarán un impacto ambiental que no se notará a simple vista”, señala.
Ambas encabezaron a un grupo de vecinos que a mediados de julio realizó un plantón en protesta por los planes del concejo. Posteriormente se entrevistaron con la gerenta Escalante, quien les señaló que los parqueos subterráneos no restarán áreas verdes, que solo se ubicarán en la zona donde no hay árboles y que está frente a la cara posterior del edificio de 8 pisos de Augusto Tamayo 180, actualmente en remodelación y que la comuna ha comprado para mudar ahí gran parte de sus oficinas administrativas y áreas gerenciales.
DAN SU PALABRA
Escalante confirma esa versión a El Comercio y añade que la intervención municipal abarcará unos 3.000 m2, poco menos del 30% del área total del parque (10.000 m2).
Vega, por su parte, aclara que el subsuelo del Parque Central fue adjudicado al Concejo de San Isidro mediante una resolución suprema en 1980, con la opción de que se destine a instalaciones subterráneas para uso comercial y estacionamiento de vehículos, pero conservando siempre la intangibilidad de la superficie y el área verde existentes.
“La sede que ahora ocupamos en República de Colombia es alquilada y pronto la desocuparemos [la de El Olivar es propia, pero pequeña]. A Tamayo irá la mayoría de oficinas del concejo y el estacionamiento subterráneo será para los trabajadores y los vecinos que vayan a hacer trámites”, dice el gerente municipal, quien agrega que la comuna administrará el ambiente subterráneo y no cobrará el parqueo.
“El edificio, que estará listo en diciembre, cuenta con unos 10 espacios para parqueo, lo que es insuficiente. Al parque se le dará el tratamiento necesario para conservar las áreas verdes y para que encima se pueda sembrar, con capas de tierra, nutrientes e impermiabilización. Minimizando la contaminación, se trabajará con un sentido paisajista. Se pondrán bancas, que ahora no hay, y caminos peatonales”, refiere la gerenta Escalante.
Ambos funcionarios explican que el expediente técnico de la obra está en plena elaboración. Ese documento arrojará el costo de inversión. Estiman que la convocatoria a licitación se dará entre finales de este mes y principios del próximo y que la obra, que duraría 90 días, empezará en octubre.
Fuente: Diario El Comercio