Al cierre del primer semestre del año se ha logrado vender un total de 7,861 viviendas en Lima Metropolitana y el Callao, cifra que casi cuadriplica las 2,292 que tenuemente se colocaron durante el mismo periodo de 2009, según información de la consultora Tinsa.
Se estima que, en promedio, entre enero y julio de 2010, unas 1,372 familias al mes lograron adquirir su vivienda. Ello significó una recaudación de S/.2,117.41 millones para las compañías del sector.
¿Qué explica este dinamismo? La estabilidad macroeconómica que vive el país ha animado a las entidades del sistema financiero a arriesgarse cada vez más por mejorar sus condiciones crediticias, lo que ha permitido que sectores que antes no tenían las posibilidades, ahora –a través de un crédito hipotecario– cumplan el sueño de la casa propia. Sin embargo, aún no es suficiente.
FACTOR ESTABILIDAD. “Actualmente, la demanda potencial de vivienda sobrepasa las 300,000 unidades, mientras que la oferta inmobiliaria actual es de 24,508, distribuidas en 635 proyectos”, detalla Gino Layseca, gerente general de Tinsa.
Esta situación, a todas luces, podría presionar al alza el precio de las viviendas, pero es atenuada por la poca capacidad de endeudamiento de la demanda potencial, debido a que la mayoría de los proyectos han sido construidos para atender, principalmente, al nivel socioeconómico B, sector de la población que puede pagar entre S/.100 mil y S/.200 mil por un inmueble.
En tanto, el grueso de las familias demandantes se concentra en los sectores C y D, cuya capacidad de pago apenas supera los S/.50 mil. Actualmente, hay 7,628 viviendas disponibles para la compra (no en plano sino en obra o para entrega inmediata), detalla Tinsa.
De ese total, casi el 90% vale más de S/.100 mil, es decir, está dirigido para atender la demanda de los sectores A, AB y B. Dicho panorama llevará a que en lo que resta del año, el precio de las viviendas mantenga cierta estabilidad, prevé Layseca. El precio entre 2009 y 2010 había aumentado hasta 15%.